Una Supermanzana es la redistribución y el calmado del tráfico liberando una amplia superficie de las calles.
La Supermanzana del barrio de la Petxina es la primera de las supermanzanas que prevé implantar el Ayuntamiento de Valencia por toda la ciudad.
El ámbito de la supermanzana en el barrio de la Petxina será el delimitado por las calles:
-Avd. Fernando el Católico
-Literato Gabriel Miró
-Juan Llorens
-Erudito Orellana
La supermanzana se plantea como un sistema de jerarquización de la red viaria que permite reconquistar gran parte del castigado espacio público para recuperar usos mixtos, centrifugando la circulación del vehículo rodado. De esta forma, el viario no es exclusivamente un espacio de circulación rodada y aparcamiento con servidumbre de paso peatonal, sino un espacio rico y vibrante, mixto, polifacético y resiliente, adaptable a las necesidades, promotor de la cobertura verde y del medio ambiente urbano y catalizador de la recuperación del espacio público.
La visión de Salvador Rueda, ideólogo de las supermanzanas, preguntado sobre la importancia del espacio público en la ciudad es clarificadora:
“El espacio público es el que define la existencia de la ciudad o no. Porque podemos tener casas, pero no son ciudad, son urbanizaciones. Y no tenemos espacio público allí, tenemos espacio urbanizado, porque no sucede nada, son como cementerios. En cambio, las ciudades lo son porque tienen espacio público. Es decir, un lugar donde se pueden realizar todos los usos y las funciones que la ciudad nos permite: que el niño pueda jugar, que pueda haber fiesta, que pueda haber intercambio económico, que pueda haber manifestación política, etc. «
«Es el espacio público lo que nos hace ciudadanos. Con el paso del tiempo hemos perdido el origen de la palabra, pero al final lo que define la ciudad es ese lugar, que es la casa de todos, y es el que hace que los ciudadanos puedan manifestarse en toda su amplitud. El problema es que hemos ocupado el espacio con unos artefactos ‘infernales’: hacen mucho ruido, producen una contaminación horrible y ocupan todo el espacio. No permiten hacer otra cosa aparte de que la gente circule por esos espacios. Lo que tenemos que hacer es un cambio de modelo de movilidad que nos permita liberar el espacio que hoy ocupa la motorización.”
Si bien formalmente parece tratarse de una reestructuración viaria, lo cierto es que el sistema, por agregación de supermanzanas de forma planificada, permite liberar ejes peatonales mucho más ricos, encontrar espacios seguros para las personas de todas las edades, pacificar el tráfico, reducir la contaminación en las zonas interiores de supermanzana y, a largo plazo, reducir también la contaminación urbana gracias a la promoción de un cambio de inercias.
Esta planificación es crucial para entender el modelo de supermanzanas, que tiene sentido como sistema, facilitando la generación de una infraestructura activa (preferiblemente verde) que debe primar sobre la gris.
Las supermanzanas promueven también un cambio de paradigma, que no supone un límite a la movilidad, sino que implican un aumento de la accesibilidad.
Contexto en Valencia
Aunque desde un punto de vista sesgado, centrado en el área temática de la movilidad, el vigente PMUS de Valencia (aprobado en 2013) plantea para las zonas de ensanche histórico de la ciudad un sistema de supermanzanas que permita, en las zonas con un menor número de zonas verdes y de estancia, recuperar parte del espacio público para usos mixtos.
El planteamiento del PMUS es generar una malla de unos 400m entre nudos de tráfico rodado, y formar una red viaria mixta con calzada no diferenciada en el resto del viario actual. Esta jerarquización permite recuperar espacios dedicados actualmente al tráfico y estacionamiento de vehículos.
